Introducción al Llenado en Aséptico | HRS Heat Exchangers

Introducción al Llenado en Aséptico

September 12, 2017 | by
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El llenado en aséptico, el envasado y el procesamiento están en el corazón de muchas operaciones habituales en alimentación, bebidas y productos farmacéuticos. A pesar de ello, la demanda de llenadoras asépticas cada vez más efectivas y autónomas nos indica que los principios básicos no siempre se entienden, dando como resultado equipos mal especificados que no funcionan como se pretende.

El diccionario nos dice que el llenado aséptico es “el llenado de recipientes estériles con alimentos u otros materiales que ya han sido esterilizados”; pero esto no explica ni los beneficios de esta técnica para los fabricantes y los consumidores, ni los desafíos en el diseño de equipos adecuados para realizar el llenado aséptico de forma correcta y eficiente.

Existen diferentes métodos de llenado en aséptico, pero las dos formas principales se basan en el tratamiento de productos calientes o fríos. Los productos calientes, que se han esterilizado usando intercambiadores de calor o autoclaves, se envasan inmediatamente para conservar su esterilidad. En comparación, el envasado en frío implica el enfriamiento de los productos después de haber sido esterilizados y el mantenimiento de esta esterilidad hasta que se han envasado. Además, existen diferentes formas de esterilizar el envase, incluyendo el uso de ácido peracético (PAA) o gas H2O2, aunque en muchos casos se usan bolsas pre-esterilizadas dentro de un recipiente externo, como cajas, bidones o tambores.

Cada técnica de esterilización es adecuada para diferentes tipos de alimentos y bebidas, pero en general, el envasado aséptico en frío ofrece una serie de beneficios que incluyen:

  • Mejora la vida útil y la seguridad del producto
  • Mejora la calidad del producto
  • Permite utilizar una amplia gama de envases diferentes

Hay un par de referencias para la primera llenadora aséptica, que data de principios de 1910, pero los detalles exactos de lo que se hizo son incompletos. El primer ejemplo confirmado de un llenado aséptico “moderno”, incluyendo partículas, aparece con la sopa Campbell a mediados de los años ochenta. Esto fue rápidamente seguido por otras empresas líderes que ayudaron a desarrollar la tecnología, como Lund Dairy, Borden y Ocean Spray. En 1991, el Instituto de Tecnología de los Alimentos lo clasificó como la innovación más importante en la tecnología alimentaria, por delante de desarrollos como la concentración, el enlatado y la liofilización. En la actualidad, el envasado aséptico puede variar desde envases de pocos mililitros hasta tanques con una capacidad de 30.000 m³ utilizados para el transporte marítimo internacional; y las mejoras en el reciclaje han superado algunas de las objeciones al uso de envases asépticos para bienes de consumo.

Como ya se ha indicado, los métodos usados para esterilizar tanto el producto como el envase pueden variar mucho y dependerán de una serie de factores. El “eslabón común” en la línea de producción es la llenadora aséptica utilizada para llenar los contenedores. Al igual que con cualquier otra máquina del equipo de procesamiento de alimentos, puede representar una inversión importante, por lo que es conveniente asegurarse de que el equipo que se elija sea el idóneo para nuestras necesidades.

Además de comparar la inversión inicial y los costes de funcionamiento y mantenimiento a largo plazo, es importante que la llenadora aséptica sea lo suficientemente rápida como para adaptarse al ritmo de su proceso productivo (y cualquier aumento potencial en la producción) y lo suficientemente flexible para hacer frente a la gama completa de productos que la línea pueda operar. También debe ser flexible en términos de los envases utilizados. Mientras que los envases al por menor para el comercio son habituales en muchas llenadoras, otras pueden trabajar con una amplia gama de tamaños, como bolsas de 200 litros en tambores o envases que oscilan entre los 3 y 25 litros, lo que incrementa enormemente la adaptabilidad.

Las llenadoras asépticas normalmente se diseñan en función del alimento o producto a tratar, por lo que le recomendamos la llenadora Serie AF de HRS, con diversos tamaños de boquilla, según se traten líquidos o líquidos con partículas, como puré de frutas y hortalizas cortadas en cubitos, concentrados, jugos, pastas, salsas, sopas y otros productos delicados. Mediante la combinación de la Serie AF de HRS con un intercambiador de calor tubular (doble, triple o multi-tubo), es posible procesar una amplia gama de productos alimenticios con y sin partículas, con viscosidades bajas y altas.

Al igual que con otros equipos de procesamiento de alimentos, las características físicas, químicas y organolépticas del producto dictarán el diseño de la llenadora aséptica, y factores como la viscosidad del producto, el tamaño de las partículas, la sensibilidad térmica, la volatilidad y la probabilidad de causar incrustaciones influirán en la especificación final del equipo. También es importante asegurarse de que la tecnología de llenado está integrada con el tratamiento térmico, por lo que, utilizando el mismo proveedor de tecnología tanto para el intercambiador de calor como para el llenado en aséptico, se garantizará no sólo la compatibilidad física, sino también que todo el ambiente de esterilización no se vea alterado entre los dos procesos.