Intercambiadores de Calor Para Producir la Sopa Más Emblemática de España
España es mundialmente conocida por su gastronomía, con platos tan emblemáticos como la paella, las patatas bravas, la tortilla, el jamón serrano y los churros, todos ellos reconocidos y disfrutados en todo el mundo.
Otro famoso plato, especialmente asociado con Andalucía, es el gazpacho, una sopa fría de tomate. Aunque menos conocido en el extranjero que otros productos culinarios españoles, es muy popular en todo el país.
El gazpacho, que nació como plato de verano para los agricultores locales, ha ganado popularidad entre las familias españolas y los turistas, gracias a sus propiedades refrescantes y su sabor distintivo. A medida que ha crecido la demanda, también lo ha hecho la producción comercial, comenzando su producción a gran escala en Murcia, en la década de 1990.
Desde entonces, cada vez más fabricantes de alimentos y bebidas han añadido el gazpacho a su gama de productos. Además de los grandes proveedores (que suministran productos altamente pasteurizados en grandes cantidades), recientemente otras empresas más pequeñas han comenzado a sacar al mercado más productos de gazpacho y salmorejo de calidad superior. El salmorejo, que se ha vuelto muy popular recientemente, es similar al gazpacho, pero se espesa con pan, lo que significa que se come en un cuenco con una cuchara, mientras que el gazpacho generalmente se bebe como una sopa fría. La mayoría de los fabricantes de gazpacho ahora también producen salmorejo.
Estos productos de primera calidad, como el gazpacho y el salmorejo, se elaboran con verduras frescas de buena calidad y con un procesamiento mínimo. Se suelen vender como productos “sin procesar”, con una vida útil corta y un precio más elevado, sobre todo en botellas de plástico más pequeñas que permiten a los consumidores ver el producto en el estante. Aunque las botellas de cartón y PET de 1 litro siguen siendo los envases más comunes, también se encuentran ampliamente disponibles formatos más grandes para familias y porciones más pequeñas para personas que viven solas o parejas sin hijos.
HRS Heat Exchangers ha suministrado equipos de pasteurización para gazpacho desde hace casi 30 años (la primera unidad en 1996), así como soluciones de intercambio de calor para ayudar a enfriar las verduras durante las primeras etapas de fabricación, además de diseños para productos de salmorejo más viscosos.
Debido a su naturaleza espesa y viscosa, el gazpacho y el salmorejo precisan intercambiadores de calor tubulares, en lugar de intercambiadores de placas (PHE). Dependiendo de la receta, pueden contener ingredientes como cereales, pan o fibras vegetales (en particular, aquellos productos diseñados para ser «auténticos» o «caseros»). La mayoría de las líneas se utilizan actualmente para producir tanto gazpacho como salmorejo, por lo que el equipo debe ser flexible y capaz de tratar los productos más espesos. Por tanto, los intercambiadores de calor multitubulares de la Serie HRS MI de grado alimenticio, diseñados para mantener la frescura del producto según la capacidad de producción requerida, son ideales.
Al ser una sopa fría, mantener su frescura característica es un desafío, por lo que cualquier proceso de pasteurización debe ser lo más delicado posible. Es decir, hay que hacerlo lo más rápido posible, con el menor aumento de temperatura posible, seguido de un enfriamiento inmediato. La presión se mantiene normalmente entre 16 y 25 bares, aunque se podría necesitar presiones más altas para el salmorejo. Esta diferencia de temperatura muy pequeña es necesaria para evitar que el producto se cocine demasiado, y el diseño de tubo corrugado de la Serie HRS MI le permite funcionar dentro de estos parámetros.
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