Fundamentos del llenado en aséptico
General
Uno de los aspectos a tener en cuenta para elaborar un producto pasteurizado con una larga fecha de caducidad y que pueda ser distribuido a temperatura ambiente, es el envasado aséptico. Esta tecnología difiere de las técnicas de envasado convencionales en el sentido de que los recipientes se preesterilizan y luego se llenan con producto frío, en un entorno frío y en condiciones comercialmente estériles.
El envasado aséptico utiliza sistemas de llenado que operan en condiciones estériles, en equipos herméticamente cerrados y equipados con sistemas de esterilización para el envasado, antes de su presentación. Éstos utilizan a menudo peróxido de hidrógeno distribuido por medio de una corriente del aire caliente, creando así una atmósfera libre de bacterias en la sección de llenado.
Antes del envasado, se realiza un tratamiento aséptico, que consiste en desinfectar todos los componentes utilizados en las etapas de acondicionamiento, limpieza y esterilización, con el fin de reducir la contaminación inicial.
Beneficios del envasado aséptico
La eficiencia de los tratamientos térmicos durante el proceso aséptico significa que no hay deterioro en el sabor o en los valores nutritivos del producto. Como resultado, un producto de mayor calidad que el obtenido con los procesos térmicos tradicionales. Otras ventajas incluyen:
- No se necesitan conservantes
- Costes de transporte menores que con IQF (congelación rápida individual)
- Se reducen los costes de almacenamiento
Envases asépticos
Debe prestarse especial atención al envase utilizado. El envase en los sistemas de envasado aséptico desempeña un papel muy importante porque, si no puede ser sellado herméticamente para proporcionar una barrera eficaz contra el oxígeno y la luz, se perderá la esterilización conseguida en las etapas de preparación.
Diversos tipos de envases asépticos, comúnmente llamados bolsas asépticas, están actualmente disponibles en el mercado. El conjunto lo forma la propia bolsa, con una boquilla de llenado, una tapa y un recipiente exterior. Los tamaños de las bolsas más comúnmente disponibles son 5, 10, 20 y 200 kg, aunque los pesos variarán según la densidad específica del producto a envasar.
El material de barrera en estas bolsas es normalmente poliéster metalizado al vacío o alcohol vinílico etílico, mientras que el cuerpo de la bolsa es normalmente polietileno de baja o media densidad.
Aplicaciones
La llenadora aséptica de HRS es idónea para satisfacer los requisitos de diferentes mercados:
- Aplicaciones de catering
- Productos de baja acidez: verduras (hojas de espinaca, guisantes, tiras de pimientos, cebolla picada), comidas precocinadas, etc.
- Fruta entera y en dados (melocotón, albaricoque, fresa, pera, manzana, frutas tropicales), pulpas, purés y concentrados de frutas
- Preparados de fruta
- Tomate en dados y concentrato
HRS Heat Exchangers diseña y fabrica llenadoras asépticas tipo «Bag-in-Drum» y «Bag-in-Box». Las llenadoras de doble cabezal están disponibles para envases asépticos con boquillas de llenado de 1 ó 2 pulgadas, según el tipo de producto que se va a envasar. Estas llenadoras utilizan bolsas pre-esterilizadas y preformadas con una tapa de 1 ó 2 pulgadas en diferentes formatos:
- Bolsas desde 5 hasta 200 litros
- Bolsas continuas desde 5 hasta 20 litros